Texto y fotografía: Mario Preciado (@mariopreciado_)
La belleza, cuestión de matemáticas y simetría.
El especialista en medicina estética nos comparte algunos apuntes sobre el ácido hialurónico y detalles de su trayectoria.
Es un profesional de la medicina estética nacido en la Ciudad de México, tiene apenas 33 años de edad, pero, con ocho años de ejercicio profesional, asegura haber inyectado más procedimientos estéticos que un médico mayor de 40 años. Con ello, Adrián Cassab rompe el paradigma de la edad, la pericia y la experiencia.
Por su clínica han pasado –revela– celebridades como la mexicana Danna Paola. El tener clientes del mundo del espectáculo puede dar una idea de la confianza que le confieren. “No son personas que busquen hacerse algo gratis, sino que pagan sus tratamientos, pero lo pagan con la confianza de que están yendo con un buen médico. Son personas que se tienen que ver bien sí o sí, si no, las críticas y todo eso llueven”, expresa Cassab en entrevista con MAXWELL.
En la actualidad, la gente recurre a él principalmente por modelación facial con ácido hialurónico, Bótox, aparatología en general y
rejuvenecimiento; todo esto en su clínica de la avenida Baja California en la Condesa. Así expresa Adrián lo que hasta la fecha ha sido
lo más satisfactorio en su carrera y lo más retador: “Lograr tanto en tan poco tiempo, porque el tener una clínica con la aparatología que tengo es bastante, generalmente no se logra tan rápido.
Los reconocimientos que he tenido por parte de los laboratorios y obviamente el atender artistas grandes (…). Retos, lo económico, porque los aparatos son muy caros, la industria de por sí es cara y se necesita mucho dinero. Es dinero que no pedí prestado, poco a poco fui creciendo”.
El cambio que probablemente necesites
Egresado de Medicina por la Universidad Anáhuac y con formación en Medicina Estética por la Universidad de Barcelona, Adrián Cassab describe su procedimiento estrella: los fillers (rellenos) de ácido hialurónico.
“El ácido hialurónico es un tipo de azúcar (molecularmente es azúcar) y lo tenemos de forma natural en el cuerpo. Es el relleno más compatible que tenemos hoy en día y podemos lograr cambios extraordinarios.
Un filler es una especie de implante, pero biológico e inyectado; así como hay cirugías de implante de aumento de mentón, de mandíbula, de pómulo, todo eso se puede lograr con los fillers”.
¿Cuál es tu concepto de belleza? –preguntamos–. “La belleza son matemáticas, porque un rostro que vemos bello es un rostro que tiene todas sus proporciones bien equilibradas, me refiero al mentón, pómulo, frente, nariz, labios. También lo emocional, siempre va ligado con el cómo nos vemos”.
El especialista nos compartió algunos de los pros de los fillers con respecto a las cirugías, uno de ellos es el tiempo, pues asegura que una consulta puede durar tan sólo 15 minutos. “No duele, es molesto, pero no doloroso. Los pros de una cirugía es que es permanente; unas por otras, pero es meterte a quirófano. También, el precio del ácido hialurónico es un pro porque es mucho más barato que una cirugía y obviamente los riesgos son menores”.
Finalmente, señala que los fillers se pueden aplicar, según los objetivos del paciente, en glúteos, cuello, escote, mentón, mandíbula, nariz, labios, surcos, ojeras, sien, pómulos, etcétera. Desde una sola aplicación pueden verse los resultados. Con la experiencia del médico hace la sugerencia de las zonas a aplicar; sin embargo, cuenta con un sistema tecnológico cuya cámara realiza un render 3D del paciente, lo analizan juntos rotando la imagen y viendo su perfil, a partir de ello determinan las zonas que se pueden mejorar.
A futuro, Adrián Cassab planea abrir por lo menos dos sucursales más en Ciudad de México y una en Miami.
