Texto: Redacción Maxwell | Fotografías: Especiales
Febrero es conocido como el mes del amor, y si estás buscando la película perfecta que te haga entrar en el ambiente romántico para estas fechas especiales, te recomendamos algunas películas icónicas que debes ver este San Valentín.
10 cosas que odio de ti (1999)
Una comedia romántica que te hará sentir como un adolescente enamorándose por primera vez. Este clásico de los 90´s es una adaptación moderna de ‘La fierecilla domada’ de Shakespeare que sigue a las hermanas Stratford, Kat y Bianca, que son muy diferentes entre sí. Mientras que Bianca es popular y enamoradiza, Kat es algo brusca y parece odiar a todo el mundo, pero ambas comparten al mismo padre sobreprotector que tiene una regla inquebrantable: Bianca no podrá salir con nadie a menos que su hermana lo haga, lo que parece algo imposible.
Parece haber esperanza cuando Cameron, el chico nuevo de la escuela quien se enamora de Bianca, forma un plan para que Patrick Verona, un chico misterioso que también es un marginado, salga con Kat, lo que inicia como una tarea pagada terminará siendo una historia de amor inesperada.
El diario de Noa (2004)
Si lo tuyo son películas de amor que te hagan sacar los pañuelos, esta es la indicada para ti. Basada en la novela de Nicholas Sparks, la historia sigue a Noah (Ryan Gosling) y Allie (Rachel McAdams), dos jóvenes de diferentes clases sociales que se enamoran durante un verano en los años 40. Sin embargo, las circunstancias y la oposición de la familia de Allie los separan. A lo largo de los años, sus caminos vuelven a cruzarse, poniendo a prueba su amor. Con un giro inesperado al final, esta película es una de las favoritas de los más románticos.
Antes del amanecer (1995)
“¿Acaso no todo lo que hacemos en la vida es una forma de ser amados un poco más?”
La cinta dirigida por Richard Linklater es una exploración a la conexión humana y los breves encuentros con desconocidos de sus protagonistas. La historia sigue a Jesse y Celine (interpretados por Ethan Hawke y Julie Delpy), dos completos desconocidos que se conocen en un tren que va hacia Viena, en el que después de pasar un rato juntos, deciden viajar a explorar la ciudad y vivir un amor inolvidable antes de que amanezca. Si te gustó esta película, no dudes en descubrir las otras dos partes de la trilogía, ‘Antes del atardecer’ y ‘Antes de la medianoche’, que también exploran las complejidades de las relaciones humanas y románticas en diferentes momentos de la vida.
Con ánimo de amar (2000)
Si te interesan más las relaciones complejas y el cine de arte, está película de Wong Kar Wai situada en Hong Kong en la década de los 60’s sigue una relación dentro en un ambiente de colores vibrantes, miradas robadas y un deseo inminente. Kar Wai nos cuenta la historia de dos parejas de casados que se mudan a departamentos vecinos el mismo día. En especial sigue a el señor Chow y la señora Chan, que después de descubrir que sus esposos les son infieles, buscan consuelo el uno con el otro. A medida que pasan más tiempo juntos, comienzan a enamorarse, pero sus principios y las normas sociales impiden cualquier relación, por lo que la película no trata sobre el amor, sino sobre el deseo hasta alcanzarlo, aunque no se consiga. Una destrozadora historia que te dejará con el ánimo de amar. de manos, miradas robadas, terremotos de deseo.
Cómo perder a un hombre en 10 días (2003)
Para cerrar está lista de películas de amor, se encuentra otra comedia romántica protagonizada por Kate Hudson y Matthew McConaughey. La historia sigue a Andie Anderson, una periodista que escribe para una revista de moda y que decide realizar un experimento para su próximo artículo, que habla sobre hacer todas las cosas que espantan a los hombres en una relación y documentar cómo logra que su novio la deje en solo 10 días. Por otro lado, Ben Barry, un publicista, apuesta que puede hacer que una mujer se enamore de él en el mismo periodo de tiempo. Sin saber los planes del otro inician una relación con momentos absurdos que eventualmente transformará a la relación en un vínculo real que no te puedes perder.