En los puertos es cada vez más común ver yates de grandes dimensiones, ya que a partir del año 2014, cuando despegó esta industria, las ventas crecieron en un 48% en este sector de recreación, comparado con años anteriores.
Por: Emmanuelle Elías (IG: @emmanuelle_elias)
Fotografía: Especiales.
Si tienes los fondos suficientes, puedes buscar a Benetti, Oceando y Ferrete, que son las compañías que dominan esta industria, para encargarles tu proyecto; aunque, si lo que quieres es romper con lo tradicional, deberás acudir a Yacht Island Design, quienes pueden llevar la construcción de tu yate a otro nivel. Ellos prometen impactar incluso al cliente más exigente.
Ejemplo de lo anterior, es el superyate Streets of Monaco −¿o deberíamos llamarlo ‘crucero’ o ‘ciudad flotante’?−, el cual se conceptualizó con la intención de imitar la zona central de la ciudad-estado independiente de Europa que aloja el Circuito de Montecarlo. Se ha recreado digitalmente hasta el más mínimo detalle del Palacio del Príncipe, el Hotel de París, el Loews Hotel, el Casino, el restaurante La Rascasse y el Puerto Hércules, incluso cuenta con un circuito para tres karts, pues no podía alejarse del espíritu automotor que le caracteriza al afamado principado.
Por ser una embarcación con capacidad para albergar todos esos espacios, es que su eslora debe ser de 155 metros; con capacidad para 16 pasajeros y 70 tripulantes. Son cuatro los grandes espacios los que incluye: La Calle de Mónaco, Casino Square, The Oasis y The Grand Atrium.
El diseño de esta embarcación de ensueño comprende fuentes, playas, un casino, un castillo y un helipuerto. The Oasis, por ejemplo, que es la zona principal de embarque, te regala una cascada increíble rodeada de jardines con una decoración exquisita y un spa. Todo esto continúa hacia la zona llamada The Grand Atrium, que da acceso a siete suites, entre las cuales está la VIP, la más grande jamás vista en un yate, pues mide 132 m2. Y si bien este yate no se ha construido aún, el fabricante está más que listo para cuando llegue el primer multimillonario que quiera invertir un billón de dólares en la creación de esta embarcación. ¿Te animas?