Edimburgo, la capital de Escocia, es uno de los destinos turísticos más visitados del Reino Unido y una atractiva Ciudad Patrimonio de la Humanidad con muchos sitios por visitar, así que al menos deberás quedarte un par de días si es que los quieres conocer.
Por: Gerardo Fabre (IG: @lebiutiful)
Fotografía: Gerardo Fabre / Dive In Life, Martin Guido y Fabio Traina (vía Unsplash).
Por ejemplo, el Castillo de Edimburgo, muy asediado por los turistas, está situado en un punto alto de la ciudad (por eso ‘Edimburgo’ significa ‘fortaleza en la loma’), es visible desde cualquier parte del Centro Histórico. Una vez estés allí, las vistas son espectaculares.
Esta construcción con mil años de antigüedad, se encuentra en perfecto estado y alberga un museo con artículos propios de la historia de Edimburgo. Otro de los castillos más famosos de la ciudad es Craigmillar, cuyas ruinas datan del siglo XIV, y está ubicado a cinco kilómetros del Centro de la ciudad.
Abbey y el Palacio Hollyrood conforman la residencia real. Allí se encuentra la Galería de la Reina, con una impresionante colección de arte perteneciente a la realeza. Por otro lado, no dejes de visitar la Catedral St Giles, conocida comúnmente como el High Kirk de Edimburgo y donde se venera al Santo Patrono de la ciudad.
La Cámara Obscura es también un sitio concurrido, muy tradicional, y lleno de magia e ilusiones, donde podrás ver hologramas e imágenes en 3D. Para pasar la tarde, debes ir a Grassmarket, donde abundan los restaurantes, cafés, bares, tiendas de artesanías y recuerdos. Ya en ese mood, puedes pasarte a la avenida Royal Mile, con abundante vida social, disfruta una bebida en un pub y luego continua tu recorrido admirando los famosos kioscos rojos telefónicos.
Mención aparte merece el Monumento de Scott, el cual se encuentra en la famosa Princes Street; con un diseño muy peculiar, fue construido en el año 1846 para conmemorar la vida de Sir Walter Scott, escritor escocés prolífico del Romanticismo británico. Tiene un estilo gótico y una altura de 61 metros. No te vayas sin conocerlo.
A lo largo del año se llevan a cabo muchos festivales culturales en la ciudad, uno de los que más miradas atrae es el Royal Edinburgh Military Tattoo, en el que cientos de gaitas son tocadas durante la representación de batallas en el Castillo de Edimburgo. Algo más por hacer en esta ciudad es disfrutar de un partido de rugby, deporte que se practica y se aprecia con mucha pasión.
Toma en cuenta que Edimburgo es la ciudad del Reino Unido con más restaurantes, así que en tu visita seguramente tendrás diversas opciones para comer bien y llevarte una grata experiencia gastronómica de esta región del planeta. Eso sí, lleva muchas libras porque allí nada es barato. Se trata de una bella ciudad, una de las más seguras de toda Europa, que te dejará cautivado. Por último, si al final te queda un día libre, te recomiendo tomar alguna excursión a las afueras de Edimburgo y maravillarte con los paisajes que presenciarás.