Redacción MAXWELL | Fotografía: Especiales
La casa del doctor Pedro Domingo Curutchet (1901-1989), eminente cirujano argentino e inventor de importante material quirúrgico, fue diseñada por Charles-Édouard Jeanneret, más conocido como Le Corbusier: célebre arquitecto de origen suizo. Durante toda su carrera promovió sus ideas sobre el desarrollo urbano modernista, donde aplicó sus principios tempranos focalizados en la utilidad y funcionalidad.
La casa propone un recorrido interior como prolongación de la vereda, donde se mezcla con un árbol existente y el patio de la planta baja. Además, se despliega sobre una superficie de 9 x 20 metros, entre medianeras y frente a la plaza Rivadavia, generando un diálogo entre el contexto y la casa a través de un parasol frente a la terraza de la fachada norte que se integra a la línea de edificación de las viviendas vecinas. Cuando se diseñó el proyecto se dividió en dos volúmenes separados: la zona de consultorio al frente y la zona de la vivienda atrás, ambas articuladas por el patio y la rampa de acceso. Esta rampa nace en la puerta de entrada, organizando la circulación interior en la forma de paseo ascendente.
La obra diseñada por Le Corbusier adoptó cada una de sus obsesiones que nacieron en 1926: los llamados cinco puntos de la nueva arquitectura. Para Le Corbusier, la planta baja de la vivienda al igual que la calle, pertenece al automóvil, ya sea para circulación o aparcamiento. Por ese motivo la vivienda se eleva sobre pilotes para permitir el movimiento de los vehículos. La superficie robada a la naturaleza por la Casa Curutchet, fue devuelta en forma de jardín en la cubierta del edificio; convirtió el espacio sobre la vivienda en un ámbito aprovechable para el esparcimiento, ya que esto permite condiciones de aislamiento térmico.
A partir de la estructura independiente se aprovechó la tecnología del hormigón armado: los pilares apoyan a las losas. El esqueleto del edificio se retrasa respecto de la fachada, esto permite mayor libertad en la construcción. Los muros exteriores se liberaron y las ventanas abarcar el ancho de la construcción, así cada habitación se encuentra perfectamente iluminada. Esta residencia, ubicada en Boulevard 53 N° 320 en La Plata, fue restaurada de 1986 a 1988 durante el centenario del nacimiento de Le Corbusier y fue declarada Monumento Nacional por la Comisión Argentina sobre monumentos Históricos Nacionales y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Actualmente, alberga al Colegio de Arquitectos y está abierta al público para visitas.