Texto: Jania Salcedo
Fotografía: Montserrat Tejeda / Alejandro Tejeda

Diseños delicados, conscientes y funcionales

Badelato es más que una marca de marroquinería: es la resignificación de una forma de crear bolsos que celebran el arte, la piel y el diseño con identidad. Con líneas limpias y sobrias que combinan simplicidad, estructura y elegancia, cada bolsa es sinónimo de un lujo que no grita, pero qué se siente. Al ser elaboradas bajo un proceso artesanal, los detalles inesperados hacen que cada una sea única, otorgándole personalidad propia y un sentido de autenticidad y exclusividad que difícilmente puede replicarse en la producción industrial.

La firma nace de la amistad entre dos diseñadoras, la ecuatoriana Valeria Bizante y la mexicana Claudia de la Torre, unidas por el deseo de crear una marca con alma, donde cada modelo tenga voz propia y cumpla un propósito: ser parte del día a día de mujeres reales. Su inspiración es justamente ella: la mujer que vive muchas vidas en un solo día, que busca funcionalidad sin sacrificar elegancia, y que aprecia lo bien hecho. “Quisimos crear bolsos que se adaptaran al movimiento, al cambio, al deseo de ser libre y elegante a la vez”.

“Badelato es una palabra inventada que surge de la unión de nuestros apellidos: Ba de Bazante y Delato de De la Torre. Queríamos un nombre que representara a ambas, que tuviera fuerza, que fuera único y que no respondiera a ninguna moda pasajera”. Así
como el nombre une sus historias, buscan que la mujer se sienta acompañada, que le recuerde quién es, que le dé confianza y que conecte con algo más profundo que las tendencias.

“Estamos convencidas de que el lujo moderno tiene que ser responsable, emocional y funcional. Badelato es un homenaje al diseño que perdura, a la belleza honesta y a la fuerza de lo bien hecho”.

Con ADN mexicano, cada creación es el resultado de un proceso completamente artesanal. Elaboradas con pieles y materiales nacionales —principalmente de proveedores locales— seleccionados por su calidad y durabilidad, cada pieza toma forma en manos expertas que conocen el ritmo de la piel y respetan el tiempo de trabajo que requiere cada detalle. Partiendo de su filosofía de producir menos, pero mejor, apuestan por la conciencia del consumo y la atemporalidad. De este modo, la propuesta se convierte en la prueba tangible de que el trabajo manual también puede ser moderno y funcional.

El equilibrio entre el diseño contemporáneo con la tradición artesanal es la esencia de Badelato. Detrás de su quehacer creativo, las diseñadoras enfrentan el desafío de honrar y retomar las técnicas artesanales y lo hecho a mano, adaptándolo a las necesidades de la sociedad moderna. Más que sumarse a los estilos del momento o imponer, apuestan por una moda más lenta: un diseño que perdura. “Diseñamos pensando en lo que permanece, no en lo que pasa”. Lo que buscan es diseñar piezas que acompañen, que resistan el paso del tiempo y que se integren con naturalidad en la vida cotidiana, sin perder la elegancia ni intención: “Nada está hecho al azar”.

Sus bolsas Badelato se pueden encontrar en línea a través de sus redes sociales. Con el fin de acercarse aún más a la comunidad, recientemente hicieron su lanzamiento oficial en UGGA Concept Store en Guadalajara, y ya trabajan en una nueva producción que estará disponible a partir de agosto en puntos físicos seleccionados de dicha ciudad y en Monterrey, México, así como en Quito, Ecuador. Además, aunque por ahora están enfocadas en diseñar piezas femeninas, están desarrollando productos unisex y masculinos, pues consideran que la piel y el diseño bien hecho no tienen género.

REDES SOCIALES

IG: @badelatomx / @valeriabazanteoficial