Ubicado a escasos 40 minutos del Área Metropolitana de Guadalajara, está Ajijic, a los pies de las montañas y bañado por el lago más grande de México.
Redacción: Liliana Núñez.
Fotografía: Cortesía.
La lista de sitios turísticos con atributos simbólicos, leyendas, historia y hechos trascendentes, parece ser cada vez más extensa. En México contamos con diversos destinos que son bastante seductores para todo tipo de turistas; ejemplo de ello es Ajijic.
Ajijic es una población pintoresca de la Ribera de Chapala –el lago más gran México−, este sitio cosmopolita con calles empedradas, tejados y fachadas de colores alegres, ha sido declarado Pueblo Mágico por la Secretaría de Turismo.
Cada una de las manifestaciones socioculturales de Ajijic influyó para que obtuviera este distintivo especial. En un mundo sumamente urbanizado, encontrar un pequeño rincón libre de anuncios estridentes y la constante movilidad de autos, es un respiro que se agradece. Sobra decir que en este destino la magia es una constante que no te abandonará sin importar la dirección que tomes.
Qué hay por hacer
Ahora, si quieres saber lo que te espera, toma nota. En este destino se conjuntan la arquitectura colonial de un auténtico pueblo mexicano y modernos servicios turísticos. Podrás escoger entre 78 establecimientos para alojarte, seguramente encontrarás uno que se adapte a tus necesidades.
Una vez que te encuentres debidamente instalado, recorre sus calles coloridas y empedradas, prueba algún platillo típico de la región, visita sus galerías y tiendas de textiles. Por la noche, toma un delicioso cóctel en uno de sus bares.
El Martes de Carnaval es uno de esos eventos que debes vivir en Ajijic al menos una vez. Lo que te espera en esta festividad son los Sayacas, hombres que llevan máscara de madera y barba de pelo de caballo, sombrero, saco o chaleco, camisa de charro, botas grandes y su pantalón con tarugos. Ellos desfilan con mucho humor y hacen particulares actuaciones, al son de las canciones típicas como ‘El pato asado’ y ‘La abeja miope’.
La multiculturalidad destaca a la vista, su comunidad artística ha hecho de este destino un lugar de descanso para la creación, inspiración y conexión con la naturaleza. Algo que te podrá sorprender a primera vista, es que este Pueblo Mágico cuenta con murales de gran formato en distintos puntos de su localidad.
Entre las actividades turísticas, destacan los paseos a caballo por sus arboladas calles; las caminatas por el malecón, desde donde apreciarás espectaculares puestas del sol, y los recorridos en lancha por el lago, donde admirarás todo el esplendor de la naturaleza.
Otra cualidad que caracteriza este Pueblo Mágico es su microclima, agradable la mayor parte del año; por ello, existe una comunidad de estadounidenses y canadienses que han decidido residir en el lugar, quienes afianzan la idea de que este destino es digno de presumirse. Ahora ya lo sabes, Ajijic conquistará tus sentidos y desearás regresar una y otra vez.