Texto: Matty Guzmán | Fotografía: Bruno Gómez De la Cueva
Empresario de alimentos y bebidas, es amante de la música y actualmente es presidente de la CANIRAC.
Un elemento clave para disfrutar tu profesión es amar lo que haces. De repente vale la pena dejar a un lado tanta formalidad y divertirte mientras aprendes. Así fue como inició la trayectoria empresarial de Alejandro, quien hace quince años emprendió con un gran amigo y socio su primer negocio llamado La Maltería.
Este pequeño bar, al que llegamos a ir, ubicado al inicio del Boulevard García de León requirió una inversión inicial de $12,000 aproximadamente, que dividido entre dos disminuía a $6,000. En aquel entonces pidieron prestado a sus familiares, pues no estaban ni cerca de tener esa suma en su bolsillo. Con este monto y una que otra cosa que tomaron prestada de su casa para decorar el lugar, comenzó un destino lleno de retos y enseñanzas. Cuando hay motivación sobran los caminos.
Con su licenciatura en Administración de Empresas con área terminal en Finanzas y su diplomado en Administración Restaurantera, Alejandro tuvo claro que ya contaba con las bases para ser empresario de alimentos y bebidas, pero se acercaba el momento del verdadero aprendizaje, ése que sólo se adquiere en la práctica después de dos o seis tropiezos. A la par de sus estudios y sus primeros proyectos en puerta, se inscribió en Bellas Artes para tomar otra de sus grandes pasiones: la música.
“Un buen liderazgo te lleva a hacer buenos negocios”.
Al fusionar sus aficiones en administración, servicio, mixología, alimentos y música −el también presidente de la CANIRAC− comenzó su trayectoria empresarial con La Maltería, La Remolacha, Beer Bank, la distribución de bebidas internacionales y, nuestro favorito, Porter British Pub.
PORTER BRITISH PUB
“Porter significa satisfacción personal, porque pensé en hacer un bar en el que a mí me encantaría estar sin pretensiones”. En Porter encontramos un lugar inigualable que se caracteriza por una mezcla de rock en inglés, un escenario, ambientación y variedad de cervezas. Lo que nos encanta de este bar -que se ha convertido en franquicia- es que durante nueve años ha permanecido fiel al concepto.
Presidente de la CANIRAC
Hace siete años fue invitado por Gilberto Morelos para desempeñar el papel de secretario, vocal y vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados. A mediados del año pasado, Alejandro tomó la batuta para presidir esta Cámara que tiene como propósito fundamental beneficiar a sus más de 1500 afiliados a nivel estatal (restaurantes, torterías, bares, antros, cantinas o taquerías) para mejorar sus habilidades empresariales a través de la capacitación en temas administrativos, ventas, costos y manejo de personal.
“Somos intermediarios entre los empresarios y el gobierno para solicitar licencias, financiamientos e implementación de nuevas tecnologías”.
Distribuidor de cervezas internacionales
Tras conocer una gran variedad de cervezas provenientes de varias partes del mundo, Alejandro pensó en la posibilidad de comercializarlas para ampliar la gama de productos que él mismo ofrecía en su bar. “Cuando me enfrenté con algunas dificultades para conseguir el abastecimiento del producto, pensé en cumplir con los requisitos para comercializar y distribuir la bebida a otros lugares que también la necesitaban”. Así surge la cadena de distribución de más de 200 etiquetas internacionales para llevar la segunda bebida más vendida del mundo a otros lugares.
