Por: José Emmanuelle Elías López | Fotografía: Especiales
La isla de Gladden se ubica a 20 millas de la costa de Plasencia, Belice, y es una de la más alejadas y tranquilas del continente americano.
Piensa por un momento: ¿Cómo serían tus vacaciones soñadas? ¿Qué te parece el mar, la playa, habitaciones de lujo, un increíble panorama y, lo mejor de todo, asomarte y ver a nadie? Suena bien ¿verdad? Esto es lo que te ofrece la paradisíaca isla privada Gladden. Si decides alojarte en la villa de casi mil metros cuadrados, la paz y el confort podrán hacer de tu viaje una verdadera e inolvidable experiencia.
Esta joya de la naturaleza –y de la industria Premium hotelera– está ubicada en el corazón del sistema de Reservas de la Barrera de Coral de Belice, y es atendida por personal invisible a los huéspedes, ya que residen en una isla más pequeña ubicada en la parte trasera de Gladden. Desde allí están listos para atender cualquier solicitud en cualquier momento.
¿Qué es lo que puedes esperar? Al despertar, disfrutarás una vista exquisita desde cualquiera de las habitaciones, cuando camines por la estancia o a través de cualquier ventana; si te paras en la entrada, tu mirada se podrá deleitar con la espectacular alberca que se pierde con el arrecife de coral que rodea la isla.
Los alimentos son preparados con productos orgánicos que crecen en los jardines de la isla; sí, como pescados que provienen directamente del mar cercano. El menú es una creación de la chef Annika Kusion, y eventualmente se cuenta con chefs invitados que se encargan de ofrecer a los huéspedes lo mejor de la cocina típica de Belice.
Si quieres tomar el sol, opta entre la playa o la alberca; o bien, desde la terraza. Allí disfrutarás los paisajes desde otra perspectiva. Aunque la villa fue diseñada para una sola pareja, cuenta con una segunda recámara por si decides compartir la experiencia. La decoración incluye muebles de madera de un gusto impecable.
Para hospedarte allí, un representante de Gladden te recogerá en la aduana y te llevará a la isla en helicóptero. El costo por noche es de 2,950 dólares si es una pareja; y si son dos, el precio sube a 3,550. La tarifa incluye todas las comidas preparadas por un chef, bebidas y vinos de primera calidad; actividades como snorkel, buceo, tratamientos de spa, diversas excursiones continentales, incluso el traslado del helicóptero. Así que, si lo piensas bien, unas vacaciones allí son un pequeño capricho que bien vale cada dólar de su precio.