Fiesta, bares, diversión y cultura
Por: Francisco Suárez
Fotografías: Julio López
El jazz es un género musical complicado de definir, ya que ha evolucionado extensivamente desde su aparición en 1900 en New Orleans hasta nuestros días. En esta historia el contexto es importante, el lugar en donde nació, era lugar de encuentro, gracias al comercio, ya que llegaban barcos, trenes y camiones para lo mismo y en consecuencia, allí circulaba mucha gente de todas partes y de muchas culturas.
Sus orígenes tienen varios elementos. Comenzando por la captura de esclavos en África y su trasladado a los Estados Unidos, los cuales trajeron sus tradiciones y su música. Ellos se ven obligados a cambiar de religión, donde adoptan los himnos religiosos a su estilo africano, resultando un nuevo tipo de himno, siendo este, el padre del jazz denominado Gospel o música evangélica. En este periodo de adaptación al nuevo mundo, se incorpora un último factor; la guerra civil estadounidense que permite el primer acercamiento con instrumentos musicales tales como: la trompeta, el tambor, el clarinete y el tambor occidental. Otros instrumentos, como el banjo, el piano y la pianola se fueron incorporando con el comienzo de la abolición de la esclavitud y es ahí donde surgen los estilos llamados Ragtime y New Orleans.
A finales del 1800, se legalizó el juego, así como se toleró la prostitución, lo que hizo que la vida nocturna floreciera a tal grado que se convierte en un problema para la ciudad. Como una solución al mismo, en 1897 el concejal del Ayuntamiento (Sidney Story) declara una zona de tolerancia, que será conocida como Storyville, donde se abrieron bares, restaurantes y casas de citas, sitios que requerían música en vivo, lo que llevó a la creación de diferentes bandas musicales, que se contrataban para amenizar en las noches de fiesta. Para aquella época, las damiselas de las casas de citas estaban todas perfumadas con olor a jazmín o como algunos decían, con olor a Jass; toda esta tormenta de eventos y situaciones da como origen a lo que hoy conocemos como Jazz.
Este estilo, tiene como columna vertebral la improvisación musical. En sus comienzos, había bandas pequeñas hasta llegar a grandes orquestas y de ahí una infinidad de combinaciones de músicos unidos con el propósito de hacer música que trasciende hasta nuestros días. Una muestra de ello, podremos apreciarla en el 50 Festival Cervantino, que tiene como invitados a dos agrupaciones musicales; Paté de Fuá y el Jazz at Lincoln Center Orchestra con Wynton Marsalis.
Será una oportunidad única de escuchar este género musical desde dos enfoques muy diferentes. Si no puedes ir a estos conciertos, date una oportunidad de escuchar estas recomendaciones en tu sistema de streaming favorito o por qué no, date la oportunidad de comprar uno de sus tantos discos.