Texto: Jania Salcedo
Fotografías: Juan Pablo Vigueras
Su creatividad gira en torno a la sociedad y la cotidianidad.
Conceptualizando su obra dentro de la corriente artística del impresionismo contemporáneo, el artista tapatío conocido como Karlos Ibarra incursionó en el campo artístico a temprana edad y se formó profesionalmente como licenciado en Artes Visuales especializado en la expresión plástica. Pero no fue, sino hasta que realizó una introspección de sí mismo y dar cuenta de su gran amor y dedicación al arte que decide “casarse con el arte”, donde lo que más disfruta es la libertad creativa, el manejo de sus
tiempos y su vivencia dentro de un espacio íntimo, su taller.
Siendo sus piezas un producto de su pensamiento, ellas son un reflejo de la sociedad donde frecuentemente expone temáticas sociales, de protesta o la cotidianidad misma siendo los artistas contemporáneos Gerhard Richter y Lita Cabellut referentes de inspiración. Más allá de la técnica, en la que incorpora la calidad de la luz con tonos fríos trabajada regularmente con acrílico, aunque ahora se encuentra en la experimentación con nuevos materiales como el cemento y la arena, su propuesta implica un lenguaje de apreciación estética que permite la libre interpretación por parte del espectador bajo un título sugerente, más no impositivo.
Trabajando con dos piezas a la vez, el artista deja fluir su imaginación sin forzar sus pensamientos entregándose por completo en la creación de arte, sólo es él y un lienzo convirtiéndose en una eterna comunión donde parece que, dentro del taller, el mundo se
detiene, aunque por fuera la vida sigue avanzando. “Lo único que puedo decir es que cuando das un paso hacia atrás y miras tu obra terminada sientes una sensación increíble. Ahí en cada pieza está mi mamá y mi papá, mis hermanas y mis amigos. Y las personas que amo y llevo en mi corazón. Porque todos ellos dentro del lienzo, son mi patria y mi hogar”, expresa.
Para él, sus obras tienen dos vidas. Una es cuando la finaliza, pues siente que está viva tras días de perfeccionamiento y trabajo en detalles de la misma. La segunda es su demostración al mundo, su exposición en una galería o museo o su adquisición por alguien más permitiendo que sea admirada o
disfrutada por otra persona.
Como parte de la proyección de su trabajo, el artista ha exhibido de manera individual y colectiva tanto en diferentes ciudades de México como en Francia, Luxemburgo y Canadá. Sus exposiciones más recientes son las siguientes: Tierras Baldías (Universidad de Colima, 2022), Caleidoscópica (Galería Patricia Mendoza Art Gallery, 2022) en San José del Cabo, México, Códices (Galería Pájaro Rojo, 2023) en Puerto Vallarta, México y una participación en un ArtHackerSpace en la exposición colectiva The Outsiders
(Galería Bruna, 2023) en Guadalajara, México.
Además, actualmente cuenta con un nuevo proyecto artístico titulado Huellas del abandono, “donde mi intención es el registro visual de un abandono colectivo, ausencia, desprotección, desalojo”, expresa. De igual manera, próximamente tendrá una colaboración en la Galería Vianey Barajas ubicada en Guadalajara, Jalisco.
Instagram: @karlos_95
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Web: www.karlosibarra.art