Texto: Jania Salcedo
Fotografía: Montserrat Tejeda

De la brasa al mar, el restaurante Mantela conmemora su segundo año con un viaje gastronómico único.

Con una cena especial de la mano del chef Jacques, los asistentes se deleitaron con un menú exclusivo que recorrió los sabores del mundo entre mariscos frescos, carnes a las brasas y detalles culinarios. Compuesto con los platillos más destacados como su Tacote de filete, Aguachile Maracuyá, Entrecote Mantela y su famoso postre: El Elote, la celebración fue un auténtico viaje.

Fiel a su espíritu, la atmósfera fue acogedora, sin pretensiones y con la hospitalidad característica de Mantela. Dos años después de su apertura, ubicado en el Andador Andares, desde que se ingresa al sitio se percibe una experiencia agradable desde su decoración majestuosa y, a su vez, cómoda, hasta la decoración de sus platillos y, sin duda, su servicio.

Mantela nació del viaje de Jacques, un cocinero apasionado que recorrió el mundo para explorar platillos e ingredientes, descubriendo que la verdadera riqueza está en las historias que acompañan a cada platillo. Así, decide instalarse en la ciudad de Guadalajara para crear recetas memorables de brasa y mar.

“La cocina de Mantela es como abrir un diario de viaje y servirlo plato por plato. Cada receta nace de un encuentro, de un gesto y de una historia. Aquí no se busca replicar cocinas exactas, sino rendir homenaje a los sabores que marcaron a Jacques, reinterpretándolos con ingredientes locales y el alma del mundo”.

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IG: @mantelarestaurant
FACEBOOK: Mantela Restaurante