La confianza en sí misma es su mejor cualidad.
Por: Damián Dragonné
Fotografía: Anel Diez
A los 17 años en su ciudad natal (Barquisimeto, Venezuela) ingresó al concurso de belleza organizado por Cardenales de Lara, certamen que elige a la modelo que representa al equipo de béisbol durante un año. Nos platicó que decidió inscribirse por su padre: “A mi papá le encantaban los deportes y yo quería ser un orgullo para él, y si ganaba, yo iba a poder estar en los juegos en su compañía”. Aquí empezó a darse cuenta que los concursos son un reto para uno mismo; es saber cuáles son tus fallas, como se pueden mejorar y sacar a relucir tu mejor versión.
“Me encantaría ser recordada como un ejemplo, ser la inspiración de muchas personas, que vean en mí una líder. Ser un personaje a seguir para las niñas y jóvenes”.
Su carrera de modelo no despegó enseguida, primero se quiso dedicar a los estudios y terminar la universidad; obtuvo dos títulos universitarios, uno en Ingeniería en Producción y una Licenciatura en Administración. Además, viajó a Malta, Italia, para perfeccionar su inglés; en este destino, la llamaron y le pidieron que participara en un nuevo concurso en Venezuela: Miss Tierra. Michell aceptó. “No era nada de lo que me imaginaba (…) Aquí teníamos que tener un propósito. Era una belleza con causa”.
La temática principal de Miss Tierra era el medio ambiente y las candidatas tenían que realizar diversas actividades, entre ellas visitar en los hospitales a niños con cáncer y hacer altruismo ecológico. Para sorpresa de todos, Michell nos contó que hizo todo esto con muletas, pues tuvo un accidente en motocicleta antes del evento. “Yo sentía que las demás concursantes tenían ventaja sobre mí, pero yo lo tomé como un reto personal”. Cuando ganó y la coronaron Miss Tierra 2019, valió la pena. Ella describe que ese momento fue inigualable e inolvidable.
Después del concurso, se quedó con la idea de la importancia del medio ambiente y su cultura, y cómo se deben de educar a los niños respecto a este tema, porque para ella “la educación viene desde casa”. Es por esta razón que decide crear su libro llamado ‘Michelland’, un cuento que trata sobre una pequeña niña que se puede comunicar con la madre tierra y escucha sus problemas. Espera que en abril pueda presentarlo púbicamente.
Michell no ha parado. La pandemia no le representó un obstáculo, pues tiene muchos proyectos en puerta: pasarelas, portadas de revista en México y Estados Unidos, el Fashion Week en Nueva York, un canal de Youtube sobre vida cotidiana, entre otros.
“Me encantaría ser recordada como un ejemplo, ser la inspiración de muchas personas, que vean en mí una líder. Ser un personaje a seguir para las niñas y jóvenes”. Michell ha trabajado arduamente en lograrlo, pues ella desde muy chica ha hecho labores sociales en su comunidad: Barquisimeto. Siempre que puede envía alimentos, insumos médicos a los hospitales y donaciones.
“En el mundo del modelaje las personas te señalan y juzgan todo el tiempo, pero no hay nada mejor que una mujer que cree en sí (…) Si eres segura de ti misma, nada, ni nadie te detiene”, ese es el consejo de Michell para todas nuestras lectoras.