En el marco de SAPICA primavera-verano 2020, platicamos con la reina de belleza, quien fungió como conductora del desfile México Es Moda.
Por: Mario Preciado (@mariopreciado_)
Foto: Emmanuelle Elías (@emmanuelle_elias)
Ganadora del certamen Mexicana Universal 2019, la joven jalisciense se prepara actualmente para contender por el título de Miss Universo que se llevará a cabo a finales de este año. Pero no sólo ha destacado por su espectacular belleza, por su innegable dominio de la palabra e inteligencia; Aragón tiene una especial sensibilidad por la escritura y conoce de ciencias como la Física.
¿Cómo surgió tu interés por escribir?
“Siempre ha sido mi más grande pasión, me encanta escribir no sólo temas de literatura, sino también poesía; el alma se transmite a través del papel (…) Pero, específicamente con mis libros, esa es mi manera de dejar mi ‘huellita’ o ‘granito’ de arena en el mundo, influir en la sociedad, intentar cambiar vidas y corazones. El primero de los que tengo publicados se llama ‘Diamante en bruto’ y el segundo ‘El color de lo invisible’. Hablan de superación personal, de la importancia de los pensamientos, de las emociones y de decretar, de cómo lo que existe en nuestra vida es reflejo de lo que hemos sentido y pensado por mucho tiempo”.
¿De qué tratará tu siguiente libro?
“Inició llamándose ‘Una reina sin corona’. Yo vengo de una designación, no gané el estatal de Jalisco. Pero me di cuenta que una corona o un resultado no te define. Después de un tiempo comencé a escribir un libro cuando participaba en el estatal, y ahí me di cuenta que las oportunidades crecen si tú las transformas a tu favor. Después se me designó para ir al nacional, también representando a Jalisco, y gané.
Entonces, el libro ya no puede llamarse ‘Una reina sin corona’ porque ya la tengo (…) Ahí fue cuando me di cuenta que depende de nosotros cambiar el rumbo de las cosas, y justamente, el tercer libro habla de mi experiencia en los certámenes, por eso va a salir hasta después de Miss Universo, porque quiero incluir toda esta nueva etapa y lo que suceda allá”.
¿Qué filosfía de vida te gusta promover?
“No hay nada más importante que darnos cuenta de que todo lo negativo que sucede en nuestra vida es para ayudar a aquellos que lo viven en la actualidad (…) Es por eso que hace cinco años formo parte de la fundación Sonrisas Reales, que lucha contra el trastorno depresivo a nivel mundial. La idea es dar conferencias, talleres y pláticas (…) Hay que ser más conscientes del impacto que generamos en los demás y en las palabras que soltamos al aire. Ese es mi motor de vida, mi misión. Nací para comunicar un mensaje y quiero seguir haciéndolo para siempre (…)”.
¿De dónde obtienes la motivación y la energía para todo lo que realizas?
“Siempre he dicho que a Dios se le olvidó ponerme un botón de pausa. No me canso de soñar y de luchar por lo que quiero; creo que es una manera de vivir la vida, de demostrar que absolutamente nada es imposible (…) Tengo muchas ganas de crecer en varios aspectos: seguir siendo conferencista, mujer empresaria… Mi motor siempre ha residido en que, entre más te haces vicioso de tus propios sueños y proyectos, más empiezas a ver resultados positivos y más te enamoras de tu vida”.
¿Cuál ha sido el reto más grande que has enfrentado y cómo lo superaste?
“El camino al éxito es difícil de explicar porque no tiene caminos directos (…) Mi mayor reto fue cuando sufrí un trastorno depresivo muy fuerte y eso me enseñó la importancia de comunicar este mensaje. Sentí que tenía mucha obscuridad en mi vida y que tenía que convertirme en mi propia luz y quizás en la luz de otras personas (…) Invito a todos a que elijan en una lista todos los problemas que más los han herido y a través de ellos ayuden a otros; les prometo que van a sanar”.