Texto: Sabrina Peña | Fotografía: Cortesía

Originario de Ciudad de México, graduado del CESSA, escuela gastronómica por excelencia.

Desde niño se desenvolvió en el mundo de la cocina gracias a su abuela Olga, ya que la pasión y los aromas que percibía cuando cocinaba poco a poco se le fueron grabando. “Mi abuela me enseñó demasiado, todavía guardo con mucho cariño y respeto sus recetas. Es por eso, que la cocina mexicana es parte fundamental de mí y, con mucho orgullo, me gusta plasmarla en donde sea que cocino.”

La trayectoria del chef Barrenechea va desde colaborar en diferentes cadenas restauranteras, tendiendo negocios propios tanto en la Ciudad de México como en Puerto Vallarta, hasta recibir invitaciones por parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores por medio del Consulado Mexicano en Shanghái, para participar en diferentes actividades de promoción y festivales gastronómicos en dicha ciudad. Actualmente, es director de operaciones en Sabal Playa Beach Club.

Para Miguel su trabajo es más que eso, es un todo: es una mezcla de ingredientes en los cuales van recuerdos, anécdotas, vivencias, experiencias. “Al momento que cocinas y las personas se atreven a probar tus platos se están transportando a sus recuerdos. Al final ése es el reto más complejo: poder transmitir todas esas vivencias a los comensales”.

Algo que disfruta de su trabajo es la libertad de plasmar la esencia del mar en diferentes platillos de nuestra gran cocina mexicana. Miguel siempre respeta el ingrediente base, así genera una experiencia única para los comensales extranjeros, quienes se llevan un pedacito de México convertido en anécdotas.

Como director de operaciones de Sabal Playa, su gran reto es posicionar al club de playa y al restaurante como una excelente opción gastronómica en Bahía de Banderas. Tiene a su disposición una cocina relajada, auténtica y gourmet donde respeta su estilo de cocina. Al final del día, logra que los dos negocios que dirige sean armónicos.